lunes, 12 de agosto de 2019

Bleak. Historia aislada 1. "Sopa"

-Damos todo lo que podemos, pero es como caminar contra el ascensor.
-Pero si no hacen nada, van para atrás.
-Las finanzas son una mierda.
El hombre de traje parpadea, la mujer en harapos también.
El café estaba frío.
Ambos lo sienten, peligro inminente.
El cambio es peligro.

-¿Axel?
El hombre de traje, como cabeza tenía una cuchara, como manos, tenedores.
-No les puedo pedir que digan la verdad levantando su mano derecho, no puedo decirles que no tengan amor por el prójimo, no les puedo dar algo que evite su maldad, que la aisle, no puedo matarlos, no puedo matarme.

El ser comienza a clavar sus tenedores en su rostro, pero solo se raya un poco.

-Preguntame algo mas, preguntame si en verdad lo doy todo, si en verdad no lo quiero todo, mirame y decime que no confías en mí, que sabes que caí en un agujero que no pude ver.
-Ax…
-Entendé que pasa dentro de mi cabeza.

Clava sus manos en la mesa de madera y golpea su rostro de cuchara sobre la misma, se dobla en dos.

-No puedo ver, no puedo ver.

La mujer en harapos huye, pero la cafetería es infinita y no hay puertas.

-Entendé lo que le pasa a mi cabeza.

Corría y corría pero no avanzaba, las luces se apagaban y prendían.
El ser esperaba sentado.
El horror crecía exponencialmente, en su cabeza todo daba vueltas, en su cuerpo, todo se sentía absurdamente suave.
La mujer cae.

-Padre, su madre, mi hijo, tu hermano, madre, mi padre, su hermano, mi madre, preguntame todo, dimelo todo, pero solo se trata de mi.

La mujer se rinde después de un par de horas, se sienta con el ser, todavía incapaz de mirarla, una cuchara doblada con traje y manos de tenedor.

Cabeza de bowl, una sopa de fideos con carne, cilantro y espinaca, una rara combinación, su cuerpo de porcelana, un vestido floreada.


-Consume
-No.

Los dos siguieron hablando en el café infinito, esperando que el otro entendiera lo que pasaba en la cabeza del otro.

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